Puedo entrar a tu casa Sara

Rosemblum ve a la mujer de su amigo Aaron asomada a la ventana...
  - Sarita, ¿tu marido está en casa?
  - No.
  - ¿Puedo subir entonces para estar un rato contigo?
  - ¿Pero, acaso me tomas por una prostituta?
  - ¿No Sarita, quién habló de pago?